jueves, 3 de febrero de 2011
EL DÍA DE CHOPI
Hoy es 4 de febrero. Y este blog lo va a dedicar completo a felicitar a mi hermanica por su 28 cumpleaños. De profesión vividora, ha sido la única que ha estado en Japón durante mis dos estancias. Y me da que no será la última.
Ahora reside en Cerdeña, donde va a la playa, hace surf y se ríe mucho. Así que si pensáis que vivís bien, olvídaros. A todo hay quien gane. Cuánto me queda todavía por aprender de la piccola sorellina. Cuando le queda un rato entre pizzas y birras, nos cuenta sus historias en una bitácora que os recomiendo no perderos.
Disfruta mucho de tu día.
¡FELIZ CUMPLEAÑOS CHOPINA!
miércoles, 2 de febrero de 2011
DAME PAN Y DIME TONTO
Mi señora madre. La mejor cocinera de todos los tiempos. Que lo mismo te prepara unos huevos con patatas al montón, que se va al río, pesca un salmón con sus propias manos, lo rellena de aceitunas negras y boniato, lo hornea a soplidos, lo salpimenta con medio tirabuzón y medio y te lo sirve diciendo "si esto se prepara en un momento".
Pero esta vez tenía un reto complicado al extremo: enseñarme hacer el pan casero que tanto echo de menos aquí. Y con las mismas nos metimos en harina.
Nuestra fé era débil, ya que mi horno es viejecete y no nos ofrecía garantías de ningún tipo. Según mi nueva sensei, el horno debe mantener una temperatura homogénea en toda la estructura para que el pan suba correctamente. Pero subió. Vaya que si subió.
Una vez enseñado, ya he cogido maña y el otro día preparé una nueva hornada. No tiene casi buena pinta. No ni ná. Menuda hamburguesaca me preparé con uno de esos panes que véis.
Como dice mi mamá, "ahora a hacerle la trompetilla al panadero de enfrente".
Gracias madre.
Pero esta vez tenía un reto complicado al extremo: enseñarme hacer el pan casero que tanto echo de menos aquí. Y con las mismas nos metimos en harina.
Nuestra fé era débil, ya que mi horno es viejecete y no nos ofrecía garantías de ningún tipo. Según mi nueva sensei, el horno debe mantener una temperatura homogénea en toda la estructura para que el pan suba correctamente. Pero subió. Vaya que si subió.
Una vez enseñado, ya he cogido maña y el otro día preparé una nueva hornada. No tiene casi buena pinta. No ni ná. Menuda hamburguesaca me preparé con uno de esos panes que véis.
Como dice mi mamá, "ahora a hacerle la trompetilla al panadero de enfrente".
Gracias madre.
martes, 1 de febrero de 2011
HOTEL CÁPSULA
Dormir en uno de estos hoteles es una excelente oportunidad para salir de la rutina de los alojamientos habituales y, además, pernoctar por un precio más reducido de lo normal. Tranquilidad, no padeceréis ni tantos agobios ni tantas incomodidades como los que más gritan nos quieren hacer creer. Si habéis dormido alguna vez en tienda de campaña, pues lo mismo, pero con más espacio y calentitos. Concretamente en el Nine Hours de Kioto encontraréis un lugar para descansar muy moderno y curioso, con instalaciones totalmente nuevas e impecable en servicios y limpieza.
Siguiendo con la tónica habitual de colaboraciones de los últimos tiempos, hoy me ayudan con esta entrada dos fieles comentaristas de este blog: Luis-sensei y Chopi en Cerdeña. Todos vuestros.
Podéis reservar directamente desde su página web por unos 5000 yenes (45 euros) por persona y noche.
¿Se atreverán los albaceteños express a dormir aquí?
Siguiendo con la tónica habitual de colaboraciones de los últimos tiempos, hoy me ayudan con esta entrada dos fieles comentaristas de este blog: Luis-sensei y Chopi en Cerdeña. Todos vuestros.
Hotel Cápsula "Nine Hours", Kioto from Fernando Picazo on Vimeo.
Podéis reservar directamente desde su página web por unos 5000 yenes (45 euros) por persona y noche.
¿Se atreverán los albaceteños express a dormir aquí?
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Albacete-Japón Express,
Curiosidades niponas,
kioto
lunes, 31 de enero de 2011
PREMIOS COMENTARIOS 2010
Funcionó. Se me ocurría días atrás pedir vuestra colaboración para darle aire y dinamismo al debate en este blog. El camino por el que llegamos a aumentar la participación nadie lo conoce. Nadie podría volver a recorrerlo sin perderse. Pero lo construimos comentando y mi satisfacción habla de ello sin tapujos en la plaza. Tuya-mía. Cuanto más leo más escribo. Y mas leéis y más escribís. Y más leo y más escribo. Este engranaje trabaja al cincuenta por ciento entre vosotros y yo mismo, y no hay forma de hacerlo funcionar si no es de esta manera. Curiosamente, aquella entrada en la que alentaba a liberar vuestra opinión se convirtió en la más comentada. Muchos empezamos esta senda, muchos otros se quedaron por el camino.
Tenía que pensar en algo especial y original, para obsequiar tanto ingenio derramado. Pensé, cosa que no debería hacer demasiado, que en el viaje que hice con mi familia por Japón, iría cogiendo un pequeño detalle de cada sitio visitado. Así, el ganador tendría algunos pequeños pedazos de este país para recomponerlos en casa. Dos lotes como el siguiente:
Té verde, algas para maki y dulces de Nikko, galleta de arroz y origami de Kioto, un pequeño Buda de Nara, un gatico de Kamakura y una poción anti-resaca de Tokio. ¡Ah!, y unos chocolates que compré también en Kioto que están buenísimos.
Y sin más dilación, vamos al ajo.
El premio en la categoría de "Mejor Comentario" de este año en el blog "Un Albaceteño en Japón" es para.....¡Guacimara Navarro!
El premio en la categoría "Comentarista más regular" de este año en el blog "Un Albaceteño en Japón" es para.....¡Lorco!, ¡Joel!, ¡Chopi!, ¡Marta!, ¡Merche! y ¡Chimo! Aquí sinceramente no he podido elegir, ya que el empate técnico entre algunos de vosotros era absoluto. Como buenos hermanicos, os iré repartiendo el premio.
¡Enhorabuena a los premiados y muchas gracias por comentar!
Tenía que pensar en algo especial y original, para obsequiar tanto ingenio derramado. Pensé, cosa que no debería hacer demasiado, que en el viaje que hice con mi familia por Japón, iría cogiendo un pequeño detalle de cada sitio visitado. Así, el ganador tendría algunos pequeños pedazos de este país para recomponerlos en casa. Dos lotes como el siguiente:
Té verde, algas para maki y dulces de Nikko, galleta de arroz y origami de Kioto, un pequeño Buda de Nara, un gatico de Kamakura y una poción anti-resaca de Tokio. ¡Ah!, y unos chocolates que compré también en Kioto que están buenísimos.
Y sin más dilación, vamos al ajo.
El premio en la categoría de "Mejor Comentario" de este año en el blog "Un Albaceteño en Japón" es para.....¡Guacimara Navarro!
El premio en la categoría "Comentarista más regular" de este año en el blog "Un Albaceteño en Japón" es para.....¡Lorco!, ¡Joel!, ¡Chopi!, ¡Marta!, ¡Merche! y ¡Chimo! Aquí sinceramente no he podido elegir, ya que el empate técnico entre algunos de vosotros era absoluto. Como buenos hermanicos, os iré repartiendo el premio.
¡Enhorabuena a los premiados y muchas gracias por comentar!
domingo, 30 de enero de 2011
DIARIO DE UN REGALO
Tómese en cuenta que una excursión de ida y vuelta en el día a la nieve será, si nada se interpone, una experiencia muy excitante y divertida. No debería olvidar tampoco, que a las cinco de la tarde cerrarán las pistas, y usted se encontrará hecho una braga y con la pesada y sucia ropa de invierno encima. Contento pero jodido.
¿No os ha pasado? ¡Pues que no os pase!
A las ocho de la mañana en la estación de Ueno. Midori, Guille, Ignacio y Nerea me regalaban un día de esquí por mi cumpleaños, donde todas las instrucciones eran esas. Yo allí como un reloj. Tren bala, y en 75 minutos en destino. Salgo de la estación y la vista se lleva el primer punto.
Antes de reaccionar, y gracias al contacto de unos de los franceses que nos acompaña, mini-bús de un hotel que nos recoge para llevarnos a pistas. En una hora y media del centro de Tokio a los remontes. El segundo punto llega de manos francesas de nuevo. Habitación para cambiarse y dejar las mochilas a veinte metros del remonte. El aliño queda completo por la poca aglomeración de gente, la buena compañía y el día soleado que nos acompaña. Sólo me queda tiempo para deslizarme y disfrutar reflexionando sobre lo que se me ofrece delante de mis ojos.
Se acerca el cierre y aprovechamos la luz artifical para hacer la última bajada de noche. Ahora llega el momento jodido. No. No en este regalo, no con estos simpáticos gabachos. Resulta que tenemos acceso gratuito al ofuro que se encuentra anexo a nuestro vestuario. Señor, qué gustazo.
Bañico caliente y más sorpresas. Cena en el mismo hotel. Comida revitalizadora, cañas, vino con especias y risas a partes iguales completaron un día difícil de olvidar.
Querido diario: recibí un increíble regalo y aprendí dos cosas nuevas e importantes. Una, que se puede ir a esquiar de ida y vuelta sin sufrir la parte negativa y dolorosa. Y Dos, y más preocupante, resulta que hay franceses más majos que el copón.
¡Muchas gracias a los cuatro!
¿No os ha pasado? ¡Pues que no os pase!
A las ocho de la mañana en la estación de Ueno. Midori, Guille, Ignacio y Nerea me regalaban un día de esquí por mi cumpleaños, donde todas las instrucciones eran esas. Yo allí como un reloj. Tren bala, y en 75 minutos en destino. Salgo de la estación y la vista se lleva el primer punto.
Antes de reaccionar, y gracias al contacto de unos de los franceses que nos acompaña, mini-bús de un hotel que nos recoge para llevarnos a pistas. En una hora y media del centro de Tokio a los remontes. El segundo punto llega de manos francesas de nuevo. Habitación para cambiarse y dejar las mochilas a veinte metros del remonte. El aliño queda completo por la poca aglomeración de gente, la buena compañía y el día soleado que nos acompaña. Sólo me queda tiempo para deslizarme y disfrutar reflexionando sobre lo que se me ofrece delante de mis ojos.
Se acerca el cierre y aprovechamos la luz artifical para hacer la última bajada de noche. Ahora llega el momento jodido. No. No en este regalo, no con estos simpáticos gabachos. Resulta que tenemos acceso gratuito al ofuro que se encuentra anexo a nuestro vestuario. Señor, qué gustazo.
Bañico caliente y más sorpresas. Cena en el mismo hotel. Comida revitalizadora, cañas, vino con especias y risas a partes iguales completaron un día difícil de olvidar.
Querido diario: recibí un increíble regalo y aprendí dos cosas nuevas e importantes. Una, que se puede ir a esquiar de ida y vuelta sin sufrir la parte negativa y dolorosa. Y Dos, y más preocupante, resulta que hay franceses más majos que el copón.
¡Muchas gracias a los cuatro!
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