Se apagan pausadamente las elevadas temperaturas que nos han mantenido activos y pletóricos durante los últimos meses. Se oscurecen las tardes prematuramente, se mueren los rayos de sol antes siquiera de poder calentar un ápice de esa piel que ya pierde su color caoba por momentos. Se apaciguan las ruidosas y alegres risas estivales para dar paso a una época tenue, fría, casi dañina para el carácter.
Se ha terminado el verano.
Y en verano los blogs se duermen, y éste para no ser menos, ha permanecido latente, hablando pero flojo, a raticos nada más, esperando a que septiembre le diera paso para repasar cada una de las noches de verano. Muchas noches llenas de viajes recorriendo nuevos rincones de Japón, España e Indonesia. No todo tiene que ser malo (o al menos es hora de querer verlo así) y partir de este mismo momento aquí estaré contando historias sobre esas aventuras pasadas y sobre ilusiones y proyectos futuros. Esto es lo que hay cuando vives en una rutina de ciclos infinitos.
Y en una pequeña parte de uno de esos diabólicos bucles es cuando suena fuerte el despertador de nuevo, cuando llega el momento de levantarse temprano para comenzar el primer día de trabajo. Esa primera y depresiva jornada de vuelta a la rutina. Y para colmar los males, uno se dirige a coger el transporte público para que la cruda realidad le devuelva a la vida de antes de aquel fantástico verano.
Y allí encuentra a quien le de un empujoncito para tomarse el retorno de otra manera.
*Vídeo grabado y cedido a este blog por el gran Chema.
Y en verano los blogs se duermen, y éste para no ser menos, ha permanecido latente, hablando pero flojo, a raticos nada más, esperando a que septiembre le diera paso para repasar cada una de las noches de verano. Muchas noches llenas de viajes recorriendo nuevos rincones de Japón, España e Indonesia. No todo tiene que ser malo (o al menos es hora de querer verlo así) y partir de este mismo momento aquí estaré contando historias sobre esas aventuras pasadas y sobre ilusiones y proyectos futuros. Esto es lo que hay cuando vives en una rutina de ciclos infinitos.
Y en una pequeña parte de uno de esos diabólicos bucles es cuando suena fuerte el despertador de nuevo, cuando llega el momento de levantarse temprano para comenzar el primer día de trabajo. Esa primera y depresiva jornada de vuelta a la rutina. Y para colmar los males, uno se dirige a coger el transporte público para que la cruda realidad le devuelva a la vida de antes de aquel fantástico verano.
Y allí encuentra a quien le de un empujoncito para tomarse el retorno de otra manera.
*Vídeo grabado y cedido a este blog por el gran Chema.
Que dura es la vuelta!!!
ResponderEliminarAquí almenos seguimos entrando bien en el metro xD (o a la hora que yo voy por lo menos...)
Un saludo desde Barcelona!
Gracias Verónica y bienvenida al blog! :)
Eliminarvamos con el nuevo curso!
La vuelta... ah! si, !eso que me pasó hace tres semanas!, las vacaciones cada vez se me hacen más cortas.:(
ResponderEliminar¿cómo se sale del metro, estando enlatado y al vacío?.
¡No se puede! Te quedas ahí metido para SIEMPRE! :)
Eliminar#ojetePaElInvierno
A veces un empujón te espabila, pero creo que éste no es el caso :P
ResponderEliminarFeliz regreso crack!
Vamos con ello Pau! Veremos que nuevas nos trae el Pachinko para el nuevo curso...
Eliminarabrazos!
Después del parón veraniego para volver a arrancar igual mas que un empujón van mejor un par de leches, si las necesitas aquí un voluntario ;)
ResponderEliminarAl lio al lio, que ya queda nada para el parón navideño :P
Seguimos esperando desde la base japonesa noticias de tu próxima ruta asiática!! Vamos loco!!
EliminarEstá genial el vídeo! Y digo yo, no puede salirse uno y esperar al siguiente metro, que probablemente no tarde más de 5 minutos? Es lo que me pregunto también cada mañana en Seúl.
ResponderEliminarNo me meto yo ahí dentro ni atao! Así que estoy de acuerdo contigo, aunque tenga que esperar cinco trenes no entro. :)
EliminarYo muchas veces espero, lo malo es que el siguiente suele estar igual o peor hahaha
EliminarXD nos tienen atrapados!
EliminarDespués de leer el título del post, francamente, me esperaba otra cosa. Y mira que el vídeo es curioso. Pero no puedo evitar sentirme un poco decepcionado. Malditas ilusiones post-vacacionales.
ResponderEliminarDespués de leer el título del post, francamente, me esperaba otra cosa. Y mira que el vídeo es curioso. Pero no puedo evitar sentirme un poco decepcionado. Malditas ilusiones post-vacacionales.
ResponderEliminarEso son buenas noticias, porque tenemos al mismo Joel de siempre renovando contrato un año más en los comentarios del blog (y eso que estás acabado).
EliminarUn abrazo!
Pues sí... El verano ya terminadito y ahora a juntar fuerzas para el otoño :)
ResponderEliminarEl vídeo es buenísimo. ¡Ver para creer, jajaja!
¡Un abrazo, figura!
Las maravillas de la civilización y el desarrollo jajaj
Eliminarun abrazo Dani!
Mira que eres Dramaqueen!
ResponderEliminarAnda que no se está bien con el fresquete
Te perdono porque no tienes ni idea! ;)
EliminarCon lo bien que se vive con el calorcete!!
Afú omaíta! Espera al siguiente!!
ResponderEliminarYa sabes lo que te espera...aunque no se ya si creerme que vendrás algún día por aquí jejee
EliminarCada vez se agradece MAS la moto!!
ResponderEliminar:)
Palabra clave.- JOEL GENIO!!!
Ya me lo contarás cuando tengas que comprarte un café de la máquina para que las manos no se te congelen! XD
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