Que viene a ser algo así como "me piro, pero que vengo en un ratico". Y es que hoy es el día en que vuelo de vuelta a España para ajustarle las cuentas al alma. Largo tiempo llevamos sin hacer números, con lo que se presentan unos días calculados matemáticamente al milímetro. La familia ocupará una gran parte de todo ello, pero habrá también tiempo de rememorar viejos viajes con los amigos de siempre, asistir a la boda de mi buena amiga Carol con muchos compañeros de la carrera, llevarme a mis sobrinas a la playa para disfrutar al cien por cien sólo con ellas, tomarme unas cañas con viajeros Albacete-Japón Express y, espero, poder ver a muchos de los que tengo en mente y que tengo pensado llamar en esta nueva visita.
Todos esos placenteros compromisos me llevarán en uno u otro momento por Madrid, Albacete, Valencia, Alicante, Málaga, Granada y Cádiz. Sitios a los que estoy encantado de volver y que pienso disfrutarlos viajándolos hasta exprimirlos. Si alguno de los que leéis vais a estar cerca y os apetece una caña (con tapa), sólo tenéis que decírmelo y, si os parece, brindamos por el verano al sol de una buena terraza. Lo estoy escribiendo y me está dando gustico sólo con pensarlo.
Entre tanto, os dejo al cuidado del blog durante este espacio de tiempo. Tendréis que andar con mucho ojo, que con el innovador diseño de Andrés y toda la pesca, seguro que algún lisssssto tiene ya pensado llevarse algo del nuevo decorado. Que no me entere yo. Malditos roedores.
Señores. Señora. Disfruten de cualesquiera sean sus actividades durante estos días, pero recordando siempre aquella novedosa Política de Sufrimiento Cero que presentamos en sociedad hace ya unos meses, y de la que ya deberíamos ser todos fuertemente adictos.
Personalmente, pienso ejecutarla a rajatabla en estas vacaciones.
¡いってきます!