miércoles, 17 de noviembre de 2010

MI SUEÑO AMERICANO, por Joel Cano

Buenas gente. Bienvenidos a la sección “Vamos a jugar a… los corresponsales”, como yo mismo y sin permiso del jefe, he bautizado. Existe también la sección “Vamos a jugar a… los médicos” o “Vamos a jugar a… las enfermeras”, pero se me ha hecho notar que para este tipo de secciones existen otros blogs.

Ya han pasado casi tres semanas desde que llegué a los USA. Cuando echo la vista atrás parece que fue ayer cuando aterricé en Seattle. Cuando tuve que tirarme tres cuartos de hora haciendo cola para que el guarda fronterizo me sellara el visado y me diera la bienvenida a los EEUU con una amplia sonrisa dibujada en la cara. Seguramente, si el personaje en cuestión hubiera pedido referencias a mis amigos de la Seu, Barcelona o Albacete, la entrada al país no hubiera sido tan plácida. Pero todo desde el afecto y el cariño, por supuesto.

Dicen de América (Estados Unidos, para ser más exactos) que es la tierra de las oportunidades. La tierra del Sueño Americano. Unos lo definen como la igualdad de oportunidades para alcanzar una meta con trabajo y determinación. Otros lo interpretan como la posibilidad de lograr más riquezas de la que ellos podrían tener en sus países de origen. Yo no sé que sorpresas me depara esta aventura al otro lado del “charco”, pero creo que mis aspiraciones no están tan idealizadas. Con algo más terrenal me conformaré.

Una birra por ejemplo… ¡Brindo por vosotros!


Y ya que estamos metidos en arena no quería desaprovechar la oportunidad para presentaros mi blog de las Américas. Una especie de diario de a bordo de mis aventuras y desventuras en Seattle o donde sea que me lleven mis pasos.

http://joelinusa.wordpress.com

Nos la vemos.

martes, 16 de noviembre de 2010

LA DE KAPPABASHI 合羽橋

Tenía que saber si había más de lo que yo conocía. Guillermo, experto en estas lides, accedió a guiarme por el que algunos conocen como el barrio de los cocinillas. En Kappabashi puedes encontrar desde todo tipo de accesorios para la restauración hasta productos de importación. Pasando por un inmenso mercadeo de comida de plástico, mal llamada, ya que está en realidad fabricada en cera. Sí, en Japón, es muy común encontrar a las puertas de muchos restaurantes réplicas fieles de los platos que encontraremos en la carta.

Tienda con tienda, sin respiro entre ellas, una calle interminable para los amantes del papeo. Pero yo buscaba algo concreto. Curioso como a veces las discusiones sólo traen aguas frescas y claras. Eterna es mi pelea con mi amiga Carolina por si el recipiente donde se cocina la paella se llama o no paellera. Es evidente que sí, pero ella aún no lo sabe, se lo estoy enseñando todavía. Da igual. Cada vez que veo una paellera, sonrío y me acuerdo de ella.

Encontrada y probada.




Y me sobró la mitad para tí, valencianita.



¡Un abrazo!

lunes, 15 de noviembre de 2010

MATSURI DE TATEYAMA

Matsuri (祭) es como los nipones denominan a sus festivales y celebraciones. Nosotros, ávidos de conocer las ferias y juergas locales, nos presentamos al sur de la prefectura de Chiba, en la localidad de Tateyama (館山市) un domingo de mediados de octubre.

Y menudo pisto había allí montado.



A grandes rasgos, y motivaciones religiosas e históricas a un lado, se trata de una fiesta con los ingredientes típicos. Desfiles varios, trajes regionales y puestos para disfrutar de la gastronomía local. Además, cómo no, de que la mayoría de los adultos llevaba una cogorza como un piano. Curiosamente, los porteadores eran los más encebollados, lo que en ocasiones y por desgracia, se traducía en pequeñas peleas y altercados entre ellos. Pero no pasa nada porque, según contaban, ese día vale todo. Es un año de preparación de estos festejos que desemboca, como en tantos otros lugares, en una liberación de emociones contenidas y de los instintos más profundos y primarios.

Bonito y curioso de visitar, ciertamente. Lo hubiera aliñado con unos mojitos así a media tarde. Y es que yo soy más de Feria de Albacete.

Ea.

domingo, 14 de noviembre de 2010

CON USTEDES, JOEL CANO


Hacía tiempo que pensaba en abrir las puertas del blog a colaboraciones. Otros puntos de vista, otras maneras de entender lo mismo, resfrescan y dan vida. Todo lo que huele a diversidad me parece interesante, de modo que, a partir de ahora, el tío Joel nos acercará, con caótica frecuencia, el continente americano desde su peculiar perspectiva.

Joel Cano nació hace 29 años en Andorra, aunque pronto fue deportado y pasó su complicada infancia en la pequeña localidad de La Seu d´Urgell, último pueblo español de camino al principado. De familia adinerada, por sus venas corre una espesa mezcla de sangre catalana y murciana. Virgen santa. En 1999, se trasladó a Barcelona donde cursó sus estudios en Ciencias Biológicas, amén de muchas otras cosas, que mejor no pronunciaré aquí. Pero su vida dió un sorprendente e inesperado giro, cuando cinco años más tarde, se presentó a una entrevista de trabajo en Albacete, ciudad condal. Lo que sucedió desde aquel fatal día hasta la actualidad, será algún día narrado con detalle en el diván de un asombrado psiquiatra. En cuatro años viviendo en la ciudad más importante del planeta, y tras pronunciar frases como "me voy a comprar al Erogggki" o "joer, que agggco, menudo fregggco hace hoy", se convirtió en albaceteño de adopción. Hoy, de estancia de investigación en la cuna de los Starbucks, lucha por hacerse un hueco entre los camaradas americanos. Pobres criaturicas.

Estás en tu casa, que ustedes lo disfruten.

¡Bienvenido amigo!